Desde el mes de enero, compañeros de la JCR, la CCC y la CEPA se sumaron a la campaña recorriendo distintos barrios costeros de la ciudad de Paraná, repartiendo boletines informativos, charlando con los vecinos e impulsando reuniones con pescadores locales. Se discutió acerca de las razones que llevan a realizarla y se invitó a participar de ella a quienes viven en carne propia la sequía y las demás consecuencias del modelo depredador que los imperialismos y los gobiernos nacional y provincial buscan recrudecer.
Tras el diálogo entre pescadores, cooperativistas y estudiantes, se pudo coincidir en que el proyecto de re-privatización del servicio de dragado y balizamiento de la Vía Navegable Troncal Paraná-Paraguay, con su intensión de llevar el dragado a 44 pies de profundidad, constituiría un daño catastrófico para el complejo y diverso ecosistema litoraleño, con sus ríos, humedales, arroyos, peces, flora, fauna y formas de vida de las comunidades rivereñas. Además de que sería un paso más en el camino de entrega y saqueo, de la extranjerización de los asuntos estratégicos del país como lo son el comercio exterior y la defensa nacional, deteriorando aún más la capacidad de ejercer soberanía ante el avance imperialista de las distintas potencias que codician nuestros recursos únicos en el mundo, inclusive allanando la posibilidad de ceder el control militar del Paraná a las fuerzas armadas estadounidenses, que desde que gobierna Milei ya operan en el río a través del cuerpo de ingenieros de su armada.
El 2 de febrero, un día después de la masiva marcha antifascista realizada en todo el país y convocada por el colectivo LGBT, se realizó en la Sala Mayo, ubicada en la costanera de Paraná, el lanzamiento oficial de la campaña Remar Contracorriente, donde estuvieron presentes El Foro por la Recuperación del Paraná, Cuidadores de la Casa Común, sindicatos, organizaciones campesinas y de pescadores, organizaciones políticas, sociales, ambientalistas, estudiantiles, miembros de la comunidad Charrúa y distintos vecinos de la ciudad. Fue una gran asamblea en la que los remadores contaron la hazaña que estaban dispuestos a realizar para frenar este proyecto nefasto e impulsar esta lucha por el Agua, la Vida y la Soberanía: remar 22 días por el Paraná, desde Clorinda (Formosa) hasta Rosario (Santa Fe) e ir parando en cada localidad para sembrar conciencia en el pueblo litoraleño acerca de esta problemática tan importante como oculta por el poder. Destacaba la presencia de Luís “Cosita” Romero, pescador artesanal que en 1996 realizó una travesía por el Paraná junto a su compañero recientemente fallecido, Raúl Rocco, para frenar la instalación de la represa hidroeléctrica “Paraná Medio”, encabezando una triunfante lucha popular contra la avanzada neoliberal que hoy es fuente de inspiración para esta nueva remada. Junto a Cosita estuvo presente el resto del equipo que le pondría el cuerpo a esta patriada: Luciano Orellano, miembro del Foro por la Recuperación del Paraná, autor del “Atlas Visual por la Soberanía” y del libro “Argentina Sangra por las Barrancas del Río Paraná”; Mariano Martínez y Marta Arriola, referentes entrerrianos de Cuidadores de la Casa Común.
Ese día compañeros de la CEPA, estudiantes de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER), tomaron la palabra para comprometerse públicamente a participar de la campaña, llevando la discusión a la facultad y organizando un festival para recibir a la remada en su paso por la ciudad.
A lo largo de un mes y medio, se llevaron a cabo múltiples encuentros, reuniones y actividades para sumar patriotas a esta gran campaña por los intereses del pueblo y de la nación Argentina. El sindicato de los docentes entrerrianos (AGMER) se sumó a la campaña con el compromiso de crear y difundir material didáctico para que Remar Contracorriente y su mensaje lleguen a las aulas. En su sede provincial se realizó la presentación del Atlas Visual por la Soberanía, de la mano de su autor Luciano Orellano, material de excepcional claridad dirigido principalmente a los niños y adolescentes. En consonancia, el sindicato de los trabajadores estatales (ATE) se sumó a la lucha y junto al Foro por la Recuperación del Paraná organizaron en el teatro municipal “3 de Febrero” una función de la obra de teatro “Punta Quebracho o la Angostura de la Patria” del grupo “Teatro de Ocasión”, haciendo llegar el mensaje soberano a los cientos de jóvenes que colmaron la sala.
En la Facultad de Artes, Humanidades y Ciencias Sociales de UADER, la CEPA trabajó para hacer posible el festival cultural de recepción de la remada. Impulsó que los estudiantes encabecen la organización del festival, participen de reuniones con otros sectores en el marco de la campaña, conformen un grupo de estudio para leer y debatir el material “Argentina Sangra…”, salgan a difundir esta histórica travesía por el río y a invitar a la recibida de los remeros en el balneario municipal de la ciudad. También los estudiantes participaron de la pintada de “La Yaguarona”, la canoa de Cosita Romero, una de las más emblemáticas de la travesía.
Remar Contracorriente llegó a Paraná el domingo 16 de marzo, y fue recibida por cientos de personas que se acercaron a participar de un día histórico, lleno de emoción compartida y de amor por la patria. La jornada inició a las 16:30 hs con números de danza y circo con temáticas alusivas al río, una nutrida feria de artesanos y emprendedores y espacios llenos de libros para los niños.
Al entrar a la playa los vecinos recorrieron la muestra de banners del Foro por la Recuperación del Paraná, muestra que acompañó a la remada en todas las localidades a las que se arribó. Los mapas de la soberanía quedaban plasmados en las impresiones de 2 metros de alto, donde se ilustra el territorio argentino, sus recursos, la Cuenca del Plata, los imperialismos que operan en ella, entre otros gráficos extraídos del Atlas Visual por la Soberanía.
A la vera del Paraná se desarrolló la impresionante performance preparada especialmente para la ocasión “Historia de una Entrega, Historia de una Resistencia Popular”, ejecutada por artistas locales, logrando conmover a la audiencia a través del impactante despliegue de los cuerpos en escena. Cuando la llegada de los remeros era inminente, al son de los tambores se desplegó una esplendorosa bandera argentina de 60 metros de largo, sostenida y agitada por personas de todas las edades.
A las 18hs cuando se vio llegar la caravana de canoas, kayaks y piraguas, la multitud eufórica se unió en un grito sagrado. Entre abrazos y el repetido canto “el río no se vende”, fueron recibidos quienes pusieron el cuerpo remando más de mil kilómetros de travesía. Luego entre todos, algunos sobre la arena y otros con los pies hundidos en el fondo barroso del Paraná, entonaron el Himno Nacional Argentino.
Se prosiguió con una ceremonia interreligiosa oficiada por curas de la Iglesia Católica y mujeres referentes de las comunidades charrúa y guaraní. Se hicieron ofrendas al río y a la madre tierra y se dio la bendición cristiana en español, charrúa y guaraní. En el escenario mayor, Cosita Romero, Luciano Orellano y Marta Arriola dieron su mensaje a la población y contaron de su acción a todos los presentes, tanto a los que escuchaban desde la playa como a los que lo hacían desde las barrancas del parque.
Tras efectuarse la lectura del documento acordado por las distintas fuerzas que participaron de la organización, se dio continuidad al festival cultural, con compañeros de la CEPA trabajando tras bambalinas para asegurar su desarrollo. Pasaron por el escenario comparsas de carnaval, conjuntos de danza, cantatas colectivas, poetas y filósofos, bandas de folclore y de rock, artistas consagrados por su trayectoria y estudiantes secundarios y universitarios que honrando lo mejor de nuestras tradiciones, demostraron con su talento y su compromiso que el fuego de la cultura y de la lucha al servicio del pueblo se trasmite y se renueva.
La jornada culminó cerca de la media noche. Todos nos fuimos con una tarea, una convicción íntima: la de difundir el mensaje de los remadores, seguir su ejemplo, luchar, sumar a nuestros familiares, amigos, vecinos y compañeros, contribuir a esta revolución cultural cuyo objetivo es llegar a ser millones para recuperar lo que nos es arrebatado por las grandes potencias imperialistas. Nos ha quedado también una certeza: para resolver las grandes necesidades de nuestro país, es indispensable que el Paraná, la Cuenca del Plata, nuestros ríos y humedales, nuestras tierras y montañas, nuestras islas y nuestros mares, sean totalmente recuperados por y para el pueblo argentino.
