A más de un año de la llegada de Milei y la Libertad Avanza al gobierno, se profundiza un modelo económico donde pocos la levantan en pala, mientras el pueblo se hunde en la pobreza. ¿Quiénes ganan y quienes pierden en el país del déficit cero?
El resultado de la política de déficit cero del gobierno es desesperante para grandes sectores populares. Sin embargo, Milei lo levanta como uno de sus grandes logros. Poco se escucha decir en los medios hegemónicos que se llevó a cabo una transferencia brutal de ingresos del pueblo hacia los principales monopolios y terratenientes, los principales ganadores del modelo impulsado por el gobierno.
El gobierno miente constantemente diciendo que estamos mejor, y sus mentiras se amplifican a través de un poderoso aparato mediático. Balancean positivamente una inflación a la baja, que en algunos sectores da una supuesta sensación de “mejoría”. Pero lo que no dicen es que esta inflación es producto de la profunda recesión en curso y de una caída generalizada en el consumo, que en octubre de 2024 fue de -16,3% en relación al año anterior. El consumo de carne vacuna, cerró en el nivel más bajo en 110 años. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, finalizaría en 44,8 kilos por habitante por año, por debajo, por ejemplo, de los 46,9 kilos de 1920. Además es importante tener en cuenta que una inflación baja no siempre es signo de estabilidad económica. En el 2001, previo a la crisis más profunda de nuestro país, se registró una inflación de -1,2%.
En 2024 se duplicó la cantidad de asalariados registrados pobres, uno de cada tres trabajadores formales es pobre. Según el Instituto Gino Germani de la Universidad de Buenos Aires, más de 2 millones de trabajadores en blanco se encuentran en situación de pobreza, y entre los trabajadores no registrados, la cifra asciende a más del 70%. Por ejemplo, de los 1,3 millones de trabajadores rurales, solo uno de cada cuatro está registrado, y el salario en blanco de los rurales en octubre fue de $675.823, mientras que la línea de pobreza estuvo en $890.060. Fue muy grande también el ajuste sobre salarios y jubilaciones, en septiembre de 2024, el salario real de los trabajadores del sector público fue un 16% inferior al de noviembre de 2023, con una caída interanual del 23,1 por ciento.
Recientemente Milei celebró que su gobierno había logrado bajar la pobreza, basándose en un dato de la UCA. Pero es un dato engañoso que contrasta con los ingresos y el poder adquisitivo de la población. La pobreza infantil creció al 63%, y la indigencia al 16,2% según cifras del Observatorio de la Deuda Social Argentina. Es la cifra más alta desde 2010. Para decirlo más claro: 6 de cada 10 chicos y chicas son pobres. Más de la mitad de la población infantil enfrenta privaciones en derechos fundamentales. Además, según un informe de la Universidad Austral, más de un tercio de los niños entre 3 y 4 años nunca asistió a un establecimiento educativo formal. Estas cifras nos dibujan el agravamiento nuestros problemas, en el último tiempo.
El plan es más motosierra
El centro del ajuste del gobierno es pagar religiosamente la odiosa y fraudulenta deuda externa. Cerraron agosto de 2024, según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) con un superávit fiscal (recaudó más de lo que se gastó) de $899.600. El 99,6% de este saldo positivo fue usado para pagar intereses de la deuda, es decir que $896.130 millones fueron usados para pagar deuda, y apenas $3531 millones para el país. Sturzenegger, dice que van a meter más motosierra para sostener este plan. Por eso el presupuesto 2025 que presentaron lo que se recaude es primero pagar hasta el último centavo de los intereses y lo que sobre se usará para todo lo demás como el pago de las jubilaciones, los salarios de los estatales, educación, salud, y gasto social. El plan de Milei es más motosierra para pagar la deuda a costa de más sufrimiento para el pueblo argentino.
Ganadores y perdedores
Según la revista Forbes, las cinco fortunas más grandes del país acumulan más de 28.000 millones de dólares. La lista la encabeza Marcos Galperín, el dueño de Mercado Libre, seguido por Hugo Sigman (Insud Pharma), Alejandro Bulgheroni (Pan American Energy Group, la petrolera más grande después de YPF), Luis Pérez Companc (Molinos Rio de la Plata y Molinos Agro y la energética Pecom) y Paolo Rocca (Techint). Si se cuentan los mayores millonarios del país la cifra alcanza casi 78.000 millones. Comparando esta cifra con la del año 2020, nos damos con que aumentó un 68%. Algunos de esto empresarios fueron aportantes en la campaña de Milei, demostrando que no “ fue una campaña a pulmón, sin un mango”. Viendo este panorama está claro quienes fueron los ganadores y los perdedores durante el primer año de Milei, y que esta fuerza política no vino a terminar con la casta, como prometió en campaña, sino a fortalecer lo más rancio de la misma. Los perdedores de este modelo son los jubilados, a los que les quitaron hasta la cobertura de sus medicamentos, obligándolos demostrar de forma miserable que no tienen fondos suficientes para pagar sus remedios. También los perdedores somos los estudiantes, que sufrimos el ajuste a la educación pública y al salario de nuestros docentes. Las mujeres y diversidades, que ya no contamos con programas de erradicación y concientización de la violencia de género. Y la mayor parte de trabajadores que no llegamos a fin de mes.
Marcos Galperin, de Mercado Libre.
Transformar la bronca en lucha y rebeldía
Pero el pueblo, que tenía expectativas de un cambio real, comienza a perder la confianza en este gobierno al que de a poco se le va cayendo la careta, y se van develando sus mentiras. Cada vez se va acumulando más dolor y bronca, que se transforma en lucha, porque cuando el cauce del rio aprieta, este se desborda. Y nosotros trabajamos por la unidad, la organización y el protagonismo de todxs, para que se desborde a favor nuestro, de los que poco y nada tenemos. A Milei y sus secuaces les decimos que este sufrimiento que están provocando no les será gratuito.
Hugo Sigman, de BIG PHARMA.
