El 15 de julio pasado, el gobierno nacional publicaba en la web del Boletín Oficial al nuevo integrante Federico Sturzenegger, blanqueando su relación. Ahora ocupa un lugar en el “Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado”. Este ministerio tiene tres subsecretarías que van a dedicarse exclusivamente a la desregulación del estado: Subsecretaría de Transformación y Reforma del Estado, Subsecretaría de Desarrollo y Modernización del Empleo Público. Las mismas, hasta ahora dependían de la Jefatura de Gabinete de Guillermo Francos.
No le preguntes a Sturzenegger qué hacía en 1998, ni en 2001, ni en 2015 ni en 2024.
Federico nació en Rufino, centro agrícola y ganadero en la provincia de Santa Fe. Hijo de Adolfo Sturzenegger, integrante de la Academia Nacional de Ciencia Económicas, de origen radical. Estudió Economía en La Plata y luego en el MIT. En este último fue discípulo de Rudi Dornbusch, un liberal alemán experto en países emergentes y crisis de balanza de pagos que apoyaba la dolarización. A lo largo de su carrera política, las instituciones (sobre todo, los sindicatos) serán un estorbo para él.
De la Rua/Menem
Durante los 90, primero fue funcionario de YPF durante el mandato de Menem, en medio del proceso de privatizaciones de las energéticas.
En 2001, durante el gobierno de De La Rúa, ocupó la Secretaría de Política Económica desde donde se llevó adelante otro capítulo del endeudamiento público con el «megacanje», una operación fraudulenta realizada en complicidad con Domingo Cavallo que, entre otras cosas, terminó en la crisis de diciembre de 2001.
Macrismo
Luego se acercó al PRO.
Cuando Macri ganó la presidencia, asumió en el Banco Central, estando procesado por negociaciones incompatibles con la función pública en el Megacanje del 2001. (Dato extra: En 2003 el perito en Ingeniería financiera Moisés Resnick Brenner probó que le produjo al país un perjuicio de unos 55 millones de dólares. Diez años después, procesaron a Sturzenegger. Los bancos que participaron: Banco Francés, Banco Galicia, Credit Suisse First Boston, Grupo Santander Central Hispano, HSBC, J. P. Morgan y Salomon Smith Barney.)
Los números oficiales del Banco Central en 2016 son fuertes: la inflación mensual de diciembre, que fue de 4%, duplicó a la de noviembre; la anual fue de 40%, unos 15 puntos más que la del 2015. En 2017 amaina, pero se está incubando una crisis que estallará en 2018 y que expulsará a Sturzenegger del gobierno.
La Era Milei
En 2022, viejos conocidos del economista libertario crearon el Instituto para el Crecimiento (IC) para producir informes y propuestas de ley, todo esto orquestado por Karina Milei para su hermano. Sobre este equipo Javier Milei se refería en medios como su “gabinete en las sombras” antes de asumir. En él, Federico Sturzenegger sería el encargado de “compatibilizar” los proyectos de LLA y el PRO.
Desde 2021 Sturzenegger alimentaba de ideas económicas al sector de Patricia Bullrich. La misión del economista era emprender una reforma del Estado que, en su versión original, tenía 3.000 artículos, decretos y derogaciones.
Hasta ahora, apenas un tercio de ellos llegó al público: 644 en el DNU que Milei anunció diez días después de asumir y 366 en la primera versión de la Ley Bases.
Ya conocemos las ideas de Sturzenegger y su equipo; declarar como “sujetas a privatización” a empresas como Aerolíneas Argentinas o Nucleoeléctrica Argentina, aunque en el segundo caso, dice que el Estado debe mantener su participación mayoritaria.
Prohíbe a los sindicatos públicos descontar parte del salario de los trabajadores no afiliados, plantea descuentos a los trabajadores en huelga, sube el período de prueba a desde seis meses a un año. Imponer un cuestionado régimen para grandes inversiones (enfocado, principalmente, en proyectos de extracción de cobre o litio) que según varios analistas consultados, es mucho más que lo que pedían las empresas del sector. Se anunció la creación del nuevo ministerio que se encargará de la desregulación de la economía y las futuras privatizaciones. Sturzenegger volvió a primera fila y con firma.





