Solidarios: a dos meses de la inundación de Bahia Blanca

El 7 de marzo, en Bahía Blanca sufrimos un temporal que paralizó la ciudad, causando destrozos, pérdidas materiales y humanas incalculables. La solidaridad del país entero no se hizo esperar, y con todos vamos a poner de pie nuevamente a nuestra ciudad.

Ese día se acumularon alrededor de 400 milímetros de lluvia en 12 horas. Fue un récord de precipitación diaria y se generaron inundaciones que causaron más de 1.400 evacuados y la muerte de al menos 16 personas. Es el tercer año consecutivo que la ciudad sufre temporales que causan daños ambientales, muertes y miles de personas evacuadas con pérdida totales de sus hogares. La ubicación de la ciudad en la cuenca inferior del canal Maldonado y del arroyo Napostá y la falta de obras públicas que faciliten el drenaje incrementaron la exposición a una inundación ante una lluvia de magnitud extraordinaria. Esto se debe a, entre otras cosas, las consecuencias visibles del cambio climático, la falta de obras públicas y el desguace del Gobierno de Milei en áreas estratégicas del Estado. Como por ejemplo, el Sistema Alertas Temprana (dependiente del Servicio Nacional Meteorológico).

Nadie se salva solo

Pese a tanta angustia y desamparo, vimos crecer también esa marea de solidaridad que recorrió a la ciudad y al país entero. Carteles como “nadie se salva solo”, “solo el pueblo salvará al pueblo”, entre otros, e innumerables campañas solidarias que iban desde cocinar viandas hasta limpiar nuestros hospitales públicos, demostraron que, con el protagonismo del pueblo es posible recuperar lo que se perdió y llegar a lugares a los que el Municipio no llega. Los estudiantes de la universidad, con el cuerpo de delegados nos organizamos colectivamente por los grupos de wasap que se habían armado para los cursos de ingreso. Primero, para saber cómo estaban nuestros compañeros y luego para impulsar “brigadas”, recorrer lugares, centralizar donaciones y repartir a quien necesite. En el camino se fueron sumando muchísimos pibes y pibas, dispuestos a ir a los barrios más golpeados. Incluso aquellos estudiantes que estaban en sus pueblos juntaron donaciones para hacer llegar. También organizamos ollas populares y “roperitos”. Fuimos casa por casa, golpeando puertas para preguntarles a las familias como estaban, y ayudar en lo que se necesite. Vimos vecinos que cruzaban calles con el agua al pecho para salvar familias del otro lado. Gente que paraba a dar una mano si estabas arreglando o empujando el auto. Personas que cuando le llevabas una donación te decían: “yo tengo algo de esto llévaselo al que necesita más.”

El gobierno es responsable

No hay que perder de vista que esta situación tiene responsables y que la principal ayuda y respuesta debe venir de este gobierno hambreador. Se estima que la ciudad de Bahía Blanca necesitará 400 mil millones para reconstruirse. Provincia destinará $273.000 millones. Por otro lado Milei, a través de un tweet de Caputo, anunció que inicialmente mandarían 10 mil millones. Pero tras una visita fugaz y casi secreta a Bahía Blanca, Milei tuvo que ceder en su postura de no girar recursos al municipio y anunció la creación de un fondo especial de 200.000 millones. La Oficina del Presidente confirmó la creación de un fondo para asistir a los damnificados «de manera directa, proporcional, y sin intermediarios». Según se explicó el fondo será administrado por la Agencia Federal de Emergencias, dependiente de Patricia Bullrich. Tanto Patricia Bullrich como el ministro de defensa, Petri, fueron insultados cuando recorrieron Bahia Blanca.
Nosotros no le creemos al gobierno cuando dice que el cambio climático no existe. Asumir que estamos en crisis climática implicaría una inversión importante en desarrollo de la ciencia y la técnica, del sistema educativo y de la industria nacional a partir de recuperar el control de los recursos naturales estratégicos como el petróleo, el litio, nuestros minerales, nuestra pampa húmeda y hasta el agua. El plan de este Gobierno entreguista y hambreador es la profundización de la deuda, el latifundio y la dependencia. No importa si para eso tienen que pegarle a nuestros abuelos en plaza de Mayo.
En la ciudad de Bahía Blanca durante 2024 se anunciaron inversiones por cifras millonarias para obras como la continuidad de la ampliación de la ruta 35 con una inversión de $27 mil millones de pesos y también en el sector industrial la empresa de Países Bajos-Inglesa, Trafigura, anunció una ampliación por 200 millones de dólares para exportar más crudo desde Vaca Muerta. Plata hay. Lo que pasó el 7 de marzo fue una demostración de lo que pasa cuando se priorizan los intereses de las clases dominantes por sobre las necesidades del conjunto. Pero también fue una demostración de que el pueblo argentino es solidario y luchador. Desde distintos rincones del país llegaron donaciones. Clubes de fútbol de primera organizaron campañas importantes. Incluso los jugadores de la selección Argentina y la AFA, llevaron a cabo un partido solidario para recaudar fondos. Y fue clave la organización y el protagonismo de los bahienses. Aunque el gobierno intenta instalar el individualismo y el “sálvese quien pueda”, acá nos plantamos con otro camino, donde el pueblo solidario lucha para ponerse de pie ante las tragedias, ayudándonos entre todos.

Compartir nota:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sobre nosotros

Somos la revista de la Juventud Comunista Revolucionaria ☭

Últimas notas

  • All Post
  • Ambiente
  • Arte
  • Barrios
  • Comunismo
  • Deportes
  • Economía
  • Educación
  • Internacional
  • Mujeres
  • Política
  • Quiénes somos
  • Secundarixs
  • Series
  • Sin categoría
  • Universidad